Drenaje Linfático Manual – Método Vodder.
¿Qué es?
El Drenaje Linfático Manual – -Método Vodder (DLM), es un tratamiento basado en una técnica de masaje avanzada, que se caracteriza por su única finalidad de desplazar la linfa, mejorando así la circulación linfática y también la venosa.
A diferencia de otras técnicas de masaje, para realizar un DLM, no es necesario ejercer presión sobre la piel o el músculo del paciente, pues la linfa o edema retenido, fluye a un nivel más superficial, por lo que los movimientos serán suaves, rítmicos y únicamente traccionarán la piel.
¿A quién va dirigido?
Principalmente, el DLM se caracteriza por mejorar hinchazón o edemas de zonas en donde se encuentre concentración de linfa. Un ejemplo claro pueden ser los tobillos o rodillas hinchadas por retención de líquido, bolsas en la parte inferior y superior de los ojos por el mismo motivo o edemas producidos tras una intervención quirúrgica.
Siempre y cuando se diagnostique un problema de mala circulación de linfa, el DLM será beneficioso para el organismo.
Igualmente, el DLM proporciona una sensación alta de relajación y bienestar a la persona que lo recibe, ya que, como hemos explicado, los movimientos que se realizan son suaves y rítmicos. Una vez concluye la sesión, la sensación de bienestar en el organismo se expande a todo el cuerpo.
Es normal que durante las horas posteriores eliminemos parte de esa linfa por la vía de la orina. Se recomienda beber abundante agua después de la sesión de DLM.
¿Hacia qué pacientes está recomendado?
- Pacientes con diagnóstico de mala circulación venosa y linfática.
- Pacientes que presenten edemas o linfedemas.
- Pacientes que se hayan sometido a intervenciones quirúrgicas, para hacer sesiones de post-intervención, tipo:
- Lipoesculturas.
- Blefaroplastias.
- Cirugía de mamas.
- Etc.
Durante las sesiones de DLM post-intervención, se combinará el masaje con un láser de baja potencia e indoloro, que ayudará a la mejora de los tejidos y la circulación para una recuperación más rápida.
¿Cuántas sesiones son necesarias, y qué duración tienen las mismas?
El número de sesiones va a depender de la mejoría continua del paciente. No se recomienda un número mínimo de sesiones, aunque entre una y otra pueden pasar más o menos días dependiendo de la evolución.
Normalmente, comenzamos con una recomendación básica de entre 5 y 10 sesiones, siempre y cuando los doctores de nuestro equipo médico no dictaminen lo contrario.
La duración de la misma va a depender fundamentalmente de la zona a tratar, y puede variar de entre 30 a 60 minutos.